San Martín Texmelucan, Pue. El derrame de
combustible de una pipa en la carretera Texmelucan-Moyotzingo a la altura de
San Baltazar Temaxcalac, provocó alerta
en los habitantes por el fuerte olor que se desprendía y en los automovilistas
derivado a que las llantas patinaban que podría generarse un accidente, lo que
origino que la Unidad de Protección Civil y Bomberos realizaran trabajos de
limpieza a lo largo de 4 kilómetros.
Fue durante la
madrugada del pasado 20 de Junio que una pipa cargada con hidrocarburo
sustraído de manera ilícita en los ductos que atraviesan por la comunidad de Temaxcalac
sufrió un desperfecto que provocó que el combustible se fuera regando, desde la
calle 16 de Septiembre hasta el entronque de la carretera
Texmelucan-Moyotzingo, y en esta vía de comunicación la fuga fue más intensa
que dejo tapizada todo un carril.
El fuerte olor
que se desprendía provoco alerta entre los vecinos quienes solicitaron el apoyo
de los cuerpos de seguridad y socorro, porque temían que se tratara de una fuga
de combustible de uno de los ductos, mientras que conductores que transitaban
por dicha carretera al ver que las llantas de sus unidades resbalaban
decidieron parar y solicitar el apoyo a las autoridades municipales, así como
alertar a los demás choferes evitar circular a alta velocidad.
Tras el reporte
la Unidad de Protección Civil Municipal a cargo de Gabino Ramírez Cortes y el
Cuerpo de Bomberos acudieron al lugar para realizar los trabajos de
recubrimiento antiderrapante para evitar que se registre algún accidente, así
como la limpieza de la carpeta asfáltica a lo largo de 4 kilómetros, desde la
empresa Rassini que se ubica en San Baltazar Temaxcalac hasta la Colonia
Carrillo Puerto.
Cabe mencionar
que a decir de los cuerpos de socorro, cuando ellos llegaron a la zona en la
madrugada tras el regado de combustible
toda la carretera, un grupo de personas llegaron a amedrentarlos para que se
retiraran del lugar, por lo que fue hasta la mañana que pudieron hacer los
trabajos de limpieza sin problema alguno.
Por: Ascención Benítez Sánchez.
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